Bueno, ya han pasado los tres días reglamentarios para pasear la cabra de nuevo. Pero esta vez pasearemos no una cabra verde, sino un pollo, que en verdad es rojo. O mejor dicho, de acuerdo con la nueva escala de color inventada en Venezuela, “rojo rojito”. Aunque podría ser perfectamente verde, si recordamos que buena parte de lo que hoy es la población psuvista roja proviene de las filas del partido verde (Copey, ¿lo recuerdan?). La confusión de rojo y verde forma parte en Venezuela de ese daltonismo político que aqueja a la patria y que al parecer no tiene cura.

Bien, bien, bien. Perdonen el exordio. A lo nuestro:

Pensaba que desde que perdimos la flexión en la lengua que hablamos (y escribimos), gracias a lo cual el latín se volvió castellano o español, el orden de los factores (sintácticos) SÍ altera el producto (semántico).

Pongo un ejemplo en este aparente galimatías gramatical. No es lo mismo decir

1) Listo el pollo

 que

 2) El pollo listo

La oración (1) puede ser una invitación a pasar a la mesa. O una expresión de satisfacción por algo que se acaba de completar.

La oración (2) es un oxímoron, concepto retórico que se refiere a la utilización de dos palabras de sentido contradictorio. Es notoria la asociación en el habla popular de los pollos con la estupidez. “Mente de pollo” no es un halago, vamos a estar claros.

!Hugo, Huguito! (entiéndase Hugo Carvajal, aka “Pollo” Carvajal»), he aquí algunos datos que se te ha olvidado correlacionar (perdona lo largo de la palabra). Eras el Jefe de la Dirección de la “inteligencia militar” (otro oxímoron) venezolana. Formabas parte de la “inteligencia” ¿pero esta no formaba parte de ti?

Yo entiendo que estuvieras desesperado por irte a vivir a Aruba. Un país con reglas, con orden, baja criminalidad y con abundancia (hay papel sanitario y todo, figúrate) y lindas playas. Y por si fuera poco, una posición estratégica para taaaantas cosas. ¡Tú me entiendes! (guiño y codazo)…

Pero mira:

1) En el 2008 habías sido incluido en la lista negra del Departamento del Tesoro por tu presunta participación en las operaciones de narcotráfico de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

2) El 16 de enero de 2014 fuiste designado Cónsul de Aruba por el presidente Maduro. Pero estaba pendiente “la aprobación por parte del Reino de Holanda” (fuente: Aporrea). Y aunque la designación estaba “en la Resolución número 014 desprendida de la Gaceta oficial número 40.335 publicada el 16 de enero de este año” (misma fuente) pueeeees, ¿cómo te explico? No había sido aprobada.

Parece que el “Placet” (literalmente “me gusta”, “me place”) no se había producido por parte de Aruba (Netherlands). Y ya habían pasado !SEIS MESES! desde la propuesta venezolana. ¿No habías mordido la vaina? Ya sé que los pollos no tienen dientes, pero es que ¡NO LES GUSTABAS! Con lo cual, al pisar Aruba, esa tierra de gracia, (de des-gracia, por ser a ti) no eras Cónsul, ni General, ni Jefe de Inteligencia. Eras un ciudadano “general”… Perdona, la lengua es cruel y la sintaxis implacable.

3) Hacía pocos días que el ex juez venezolano Benny Palmeri-Bacchi (¿te suena?) fuera arrestado en el Aeropuerto Internacional de Miami, cuando se disponía a llevar a su familia a unas vacaciones de dos semanas en Disney World (que conste que desapruebo tanta crueldad). Los cargos que pesan en su contra son los mismos que los que hay en tu caso. Mmmmm.

Bueno. No sé. Sumando 1 + 2 +3 da algo. Y no me digas que da 6. ¿En qué estabas pensando? ¿Quién es tu asesor?

Desafortunadamente, lo que era el «Kingdom of the Netherlands» se convertirá para ti en el «Kingdom of the Neverland». El Reino del Nunca-Jamás.

Yo sinceramente te recomiendo que pienses rápidamente en un buen plan de jubilación. Lástima que los planes de jubilación para pollos se llamen “hervido”, “parrilla” o “consomé”. Pero nada es perfecto.

Para despedirme, escriben por ahí (pero ya sabes como es la envidia) que cuando te arrestaron te hiciste un poco en los pantalones. No te preocupes, eso pasa hasta en los mejores traseros.

Ya se sabe que los pollos y algunos militares tienen la tripa floja.